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- 20 dic 2024
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 23 dic 2024
Escribir un poema no es solo plasmar palabras en papel, es un viaje que transforma sentimientos, recuerdos y emociones en arte. Cada poema que creamos está hecho a medida, pensado para conectar profundamente con quien lo recibe. Hoy queremos compartir contigo cómo es nuestro proceso creativo, desde la inspiración inicial hasta el acabado final.

Todo comienza con una chispa: la historia que nos cuentas. Puede ser un recuerdo compartido, una emoción que quieras expresar, o incluso algo que nunca te has atrevido a decir antes. Estas palabras son la base sobre la que construimos un poema único. Nos tomamos el tiempo de escuchar y comprender lo que quieres transmitir, reflexionando sobre qué emociones vamos a manejar, qué imágenes pueden ser más poderosas para cada historia. Cada detalle que compartes con nosotros se convierte en una pieza clave del este rompecabezas poético.
Elegir el tono adecuado es esencial para dar vida al poema. Alegre, nostálgico, romántico o inspirador, cada poema tiene su propio ritmo y energía, su alma. Nuestro trabajo es encontrar la que mejor encaje con tus deseos. Por ejemplo, si buscas transmitir amor, usamos imágenes cálidas que evoquen cercanía, como un abrazo o un rayo de sol en invierno, y si el tono es de gratitud, recurrimos a metáforas que representen generosidad y fortaleza, como un árbol que da sombra en un día caluroso. Con la inspiración y el tono definidos, comenzamos a escribir.
El primer borrador es como un lienzo en blanco donde las palabras fluyen y las emociones toman forma, buscando el equilibrio entre lo que queremos decir y cómo lo queremos decir, cuidando que cada verso tenga un propósito. Escribir un poema también es un proceso de descubrimiento donde a veces una palabra tuya, una frase nos lleva en una dirección inesperada, permitiendo que el poema crezca de forma orgánica. La prioridad es siempre capturar la esencia de lo que se quiere transmitir.
El proceso de revisión es dónde la magia sucede. Cada palabra se analiza, se pulen detalles y se ajusta el ritmo hasta que todo encaja. Queremos que cada poema sea como un reloj bien ajustado donde nada sobra y todo funciona. Asegurándonos de que tenga un flujo natural con transiciones suaves y una estructura que invite a ser leído o recitado.
El poema terminado no solo se entrega, se presenta. Para nosotros, el cómo lo recibes es tan importante como las palabras mismas. Puede ser manuscrito en papel de alta calidad, grabado en un archivo de audio que resalta cada palabra o acompañado de una ilustración personalizada que complementa sus emociones y significado.
Cada entrega está pensada para que el destinatario sienta que está recibiendo algo más que palabras: un recuerdo tangible y significativo, creado especialmente para él o ella. Encargar un poema es mucho más que un proceso de compra; es una experiencia artística.
Cada poema que creamos es un viaje único donde las emociones se convierten en palabras y las palabras en arte, creando un puente entre quien lo regala y quien lo recibe. Si tienes algo que decir y no sabes cómo expresarlo, deja que la poesía lo haga por ti. Estamos aquí para ayudarte a capturar esos sentimientos en algo eterno.
¡Descubre la magia de un poema personalizado y regala emociones inolvidables!

